Más de 25 años dedicados a nuestra pasión
Me enamoré de ésta raza el año 1998, desde entonces y hasta día de hoy, o sea, hace 25 años, nunca me he separado de ellos. He disfrutado de los beagles tanto como perros de trabajo como animales de compañía. A lo largo de los años he visto que mucha gente los cataloga como cazadores, pero creo que ésta descripción no se ajusta a la realidad, ya que como perros de trabajo pueden ser brillantes en la recolección de la trufa, en los aeropuertos donde ayudan a las policías de muchos países a localizar substancias o productos prohibidos en los equipajes, ayudar a las personas con dificultades psicológicas o físicas , en la caza , etc. Siempre explico que no nacen enseñados, por tanto, si queremos un ejemplar para trabajo, sea el que sea, habrá que adiestrarlo. El nuestro es un proyecto sin fin, siempre nos esforzamos en escoger los mejores ejemplares para ir mejorando nuestra línea. Nuestro afijo Beagles de Puigventós es, después de tantos años, muy conocido.